Guía a los hostales juveniles

Entre los diferentes tipos de reservación existentes los Hostales de la juventud son, sin dudas, las preferidas de los jovenes y de aquellos que buscan un hospedaje con precios aceptables.

Es bastante apreciada la posibilidad de encontrar un hospedaje digno con pocos gastos y la oportunidad de conocer nuevas personas, extranjeras, con quienes estrechar nuevos lazos de amistad.

No tendrán, seguramente, todo el comfort que puede ofrecer una pensión o un Hotel, pero importa poco: basta solo tener un poco de espíritu de adaptación.

Además, a pesar de que comunmente son llamados Hostales de la juventud, en realidad están abiertos a todos.

Algunos hostales disponen de habitaciones familiares a precios ventajosos respecto a otros tipos de hospedaje.

El primer hostal de la juventud fue fundado en Alemania en el año 1909 por Richard Schirrmann.

Schirrmann era un maestro alemán que organizaba frecuentes viajes y excursiones con sus estudiantes.

Durante una excursión, una tormenta improvisa lo obligó a él y a sus alumnos a encontrar refugio en una escuela.

Fue entonces que a Schirrmann se le ocurrió la idea de hospedar grupos de estudiantes en las escuelas cerradas por las vacaciones de verano. La iniciativa tuvo mucho éxito, y ya en los años 30 existían más de dos mil en Alemania.

La idea se difundió rápidamente en el resto de Europa y, después de una conferencia internacional celebrada en el 1932 el movimiento inició a difundirse también en los Estados Unidos y en muchos otros países.

Nacía la Federación Internacional de los Hostales de la Juventud, con el objetivo de asociar todas las estructuras que ofrecían habitaciones a precios económicos dedicados a los jóvenes.

Pasando el tiempo, el concepto de hostal ha sufrido una evolución adaptóndose a las distintas exigencias de los tiempos modernos, y ahora los hostales hospedan visitantes de todas las edades, garantizando al mismo tiempo precios aceptables y un servicio de buena calidad, con la característica de ofrecer una atmósfera única y fascinante, muy diferente a la de los hoteles normales, particularmente apreciada por los jóvenes.

Los viajeros que deciden hospedarse en los Hostales son de un tipo muy particular de cliente, en inglés existe un términe específico para definirlos "backpacker", pero que en realidad hace referencia a la omnipresente grande mochila, verdadero "símbolo" del estilo de vida de los clientes más asiduos de los hostales.

Normalmente son jóvenes que viajan por períodos largos, llevando con ellos lo mínimo indispensable para viajar, viendo que el equipaje pesa y puede ser obstáculo en muchas situaciones.

Son viajeros "low budget" que se desplazan o se mueven en tren, en autobus o en autostop, y viajan con poco dinero y un ojo atento a los gastos, porque ahorrarse algunos euros les puede permitir visitar otra ciudad y prolongar el viaje.

Los clientes asiduos a los hostales son diferentes al viajero normal: no se limitan a ver los monumentos de las ciudades que visitan, sino que sienten el deseo de descubrir y profundizar en el estilo de vida del país que los acoge, conocer gente nueva y establecer relaciones humanas. Muchos de ellos, sobre todo aquellos que provienen de paises lejanos como Australia y Nueva Zelanda, se han tomado un año "sabático" para recorrer el mundo.

Al día de hoy la oferta de Hostales es bastante diversificada, cada uno con características diferentes.

Hay hostales que parecen hoteles, otros son completamente diferentes.

En cada caso, la principal característica que diferencia a los hostales de los Hoteles es que los segundos ofrecen solo habitaciones privadas, mientra los hostales ofrecen también la posibilidad de dormir en habitaciones que pueden tener de 4 a 20 o más plazas.

Los dormitorios pueden ser pequeños o grandes, solo para mujeres, solo para hombres o mixtos, pero esta particularidad significa, en cada caso, dormir en habitaciones compartidas con personas que no se conocen (todavía).

A pesar de que muchos Hostales se acercan a los estandares de los hoteles, ofreciendo también habitaciones privadas con servcios anexos, la atmósfera de los hostales es de todas maneras bastante diferente a la del hotel normal y, precisamente, la atmósfera sigue siendo su principal característica dominante.

Mientras los hoteles se limitan a suministrar a sus clientes un lugar cómodo y confortable donde pasar la noche, los hosteles tienen una atmósfera más de "community", dado que frecuentemente se termina por compartir con los demás huespedes no solo la habitación, sino también la mesa del desayuno, la lavadora, y todo lo demás.

Muchos hostales organizan fiestas y excursiones, y muchos tiene también un bar donde los huespedes pueden encontrarse y hacer amistad.

En un hostal es mucho más fácil relacionarse y conversar con perfectos desconocidos intercambiandose consejos, informaciones, opiniones y puntos de vista.

En definitiva, los hostales son un óptimo lugar donde establecer nuevas relaciones interpersonales y conocer nuevos amigos, y donde encontrar y confrontarse con gente de otros países y culturas, que tal vez conocen la ciudad donde se encuentran mucho mejor que ustedes y pueden darles buenas indicaciones sobre a dónde salir de la noche, que hacer o que lugares visitar.

Un dormitorio es una habitación con muchas camas - frecuentemente literas - cada una de las cuales puede ser reservado separadamente por un cliente del hostal.

La habitación es compartida por diferentes personas que no se conocían de antes.

En función del hostal, un dormitorio puede tener de 4 a 20 o más camas; algunos hostales dividen los dormitorios por sexo, otros en cambio tienen dormitorios mixtos.

Este tipo de colocación es tendencialmente más económica que una habitación privada, y requiere un mayor espíritu de adaptación y flexibilidad, visto que los compañeros de habitación pueden tener horarios y costumbres diferentes entre ellos.

Pero la situación es mucho más interesante, porque facilita la socialización entre las personas.

Si se comparte una habitación con una persona, casi siempre es más fácil romper el hielo porque hay una gran cantidad de argumentos para comenzar una conversación.

Los dormitorios eran el tipo más común de habitación en la mayor parte de los Hostales hasta hace algunos años. De un tiempo a esta parte, adecuandose a los tiempos y al nacimiento de nuevas exigencias, la mayor parte de los hostales ofrecen también habitaciones privadas, que normalmente tienen de 2 a 4 camas, y frecuentemente están siempre dotadas de ducha y baños privados.

En este caso, la permanencia en un hostal es similar a la de un hotel standar, menos por las ocasiones sociales que ofrece el hostal en el compartir ciertos espacios como lavandería, teléfono, Internet, y los eventos organizados por el hostal como cenas y excursiones.

Para respetar las normas de higiene y limpieza cuando hay tantos clientes circulando, es necesario ser muy eficiente y limpiar frecuentemente.

Cierto, si las duchas y los baños son usados por muchas personas, después de un rato no tendrán un buen aspecto, pero la mayor parte de los hostales se limpian frecuentemente.

Depende mucho del país donde se encuentra, pero la mayor parte de los hostales no permiten hacer uso de bebidas alcohólicas en la habitación.

Algunos tienen bar, normalmente en los Estados Unidos existe el limite de edad para el acceso a las áreas cercanas al bar, otros no.

Como siempre, es importante respetar las demás personas y al país donde somos huéspedes.

En las habitaciones normalmente está prohibido fumar.

Si estás en los Estados Unidos, probablemente no podrás fumar en ninguna parte.

En Alemania habrá seguramente un distribuidor de sigarrillos en la entrada del hostal. Esto depende también del país donde te encuentres.

Si tienes objetos de valor, preguntrar en el hostal si tienen cajas de seguridad (casi siempre son entregadas gratuitamente), o estén atentos a no dejar nada a la vista.

En cada caso, los hostales no hacen entrar personas que no estén hospedados, y esto desalienta los robos porque se descubre pronto quien puede haber entrado en una determinada habitación en un determinado momento.

Los Hostales de la juventud son el lugar ideal para socializar y conocer gente nueva.

Dado que la mayor parte de los huespedes son jóvenes, hay muchas ocasiones para hacer amistad y establecer relaciones.

Muchos hostales organizan fiestas, encuentros o juegos con premios, o tienen un bar dentro o cercano a la estructura, donde es fácil conocer a los otros huespedes.

Dado que la gente que se hospeda en los hostales normalmente es más abierta a nuevas experiencias respecto al turista medio, es decididamente más fácil entrar en contacto con otras personas, intercambiare consejos, etc.

Muchos viajeros recorren el mundo solos por un año o más, y por tanto con facilidad inician una conversación con cualquiera, visto que casi siempre el objetivo de su viaje es conocer gente nueva y profundizar en los conocimientos de las culturas de otros países.

Recuerda siempre: cuando encuentres gente de países diferentes al tuyo, es fácil darse cuenta que tienen opiniones muy diferentes a las tuyas sobre la política, el sexo, la religión, y también sobre tu país de origen.

Por tante debes ser tolerante y flexible.

En definitiva, si te hospedas en un hostal, no te sorprendas si haces muchas amistades (sobre todo si hablas una o más idiomas extranjeros) que podrían durar por muchos años.